Tod el e-learning amenazado por una patente

Una patente otorgada el año pasado pone en peligro todo el software utilizado para e-learning, especialmente el que está basado en Software Libre. Es una noticia que me hace reflexionar acerca de la vigencia del sistema actual de patentes, de la “palabra” dada por las empresas y de la validez, además, con que las compañías usan el número de patentes otorgadas por año, como un elemento de juicio positivo.
Repasando viejas noticias, reencontré una de C|Net que había recolectado allá por noviembre del año pasado. Se trataba de un reclamo por parte del Software Freedom Law Center, una organización que apoya al Software Libre (como su nombre lo indica… je), a la Oficina de Patentes de USA para que reconsidere una patente otorgada a la empresa Blackboard. Según el Centro, esa patente es espuria, sin valor, y podría amenazar a tres proyectos de software educativo basados en SL.
La patente, que lleva el número 6.988.138, se refiere a un “sistema de soporte y métodos para educación basada en Internet”. Según Richard Fontana, el abogado del Centro, es una “patente basura” y podría “cubrir prácticamente cualquier software de e-learning que esté en uso en este momento”.
Este reclamo, además, se produce poco tiempo después de que Blackboard haya demandado a Desire2Learn, una compañía rival de software propietario, por infringir esta patente.
Blackboard jura y perjura que este es un caso aislado, que no es el comienzo de una campaña multi-demandas y que, por el contrario, “usamos y soportamos el software open source y nuestro foco no es ni el Open Source ni las Universidades”. Se supone que en estos días debería expedirse la Oficina de Patentes y si, mientras tanto, querés leer el artículo completo, lo encontrás acá.
Pero lo que me provoca esta noticia es un par de reflexiones que quiero compartir con ustedes y que me gustaría que las comentaran en el blog. Lo primero que se me ocurre es que esta es una más de las tantas patentes que ponen en cuestión, en entredicho, todo el sistema de patentes de los Estados Unidos y no sé si no lo hacen con el resto del mundo. Suena como cuando Microsoft quiso patentar el doble clic. En otras palabras ¿qué es verdaderamente patentable y qué no lo es? Desde este punto de vista ¿cuánto vale verdaderamente el ranking de patentes que enarbolan las compañías cuando dicen, generalmente una vez por año, “somos los primeros/segundos/líderes/etc. en número de patentes otorgadas en el año…”? La pregunta es ¿cuántas de estas patentes se refieren a innovaciones verdaderas?
La otra reflexión que me surge es que sin un sistema de patentes (o de documentación, en todo caso) adecuado, que balancee correctamente los intereses de las empresas con los de la población y, sobre todo, que documente perfectamente lo que se quiere patentar y con qué propósito, ¿cómo creerle a una compañía que te dice que nunca te va a demandar? Hoy en día la alta dirigencia cambia con frecuencia, las empresas se compran, se venden o se fusionan… ¿cómo saber que se van a respetar los acuerdos o las palabras dadas? Se requiere imperiosamente un sistema que asegure que no se puede (o sí, es una cuestión de elección) demandar a alguien por algo.
Y eso sin contar las maniobras que embarran la cancha, una acusación que le hacen muchos a Novell que, al haber aceptado el acuerdo con Microsoft, le dio fundamentos a ésta para argumentar que Linux infringe patentes propiedad de la compañía de Redmond. Pero eso, pequeño Adams, es otra historia.

Fuente: http://www.tecnozona.com/zona_del_dire/todo-el-e-learning-amenazado-por-una-patente/

Publicado por admin en Zona del dire (Editorial)